Con la Eucaristía, que fue presidida por el Arzobispo de Guadalajara, Cardenal José Francisco Robles Ortega, el Hospital Alcalde celebró su aniversario.
Monserrat Ayala
Para agradecer a Dios Nuestro Señor por su labor en beneficio de los más necesitados, el Arzobispo de Guadalajara, Cardenal José Francisco Robles Ortega, presidió la Misa con motivo del 88 aniversario del Hospital Alcalde, ceremonia a la que asistieron directivos y personal administrativo.
Durante su homilía, el Purpurado reconoció el trabajo de aquellos que, día a día, dedican su tiempo a cuidar y atender a los enfermos, a quienes dijo, realizan una labor digna de admirar, ya que con su apoyo se puede lograr sanar en cuerpo y alma a las personas.
Asimismo los invitó a continuar con esa vocación de servicio, pues Dios se hace presente en cada historia de los pacientes que acuden al nosocomio.
“Si son conscientes que Dios se vale de nosotros para tratar la carencia de salud que tienen los hermanos que vienen aquí, seguro lo haremos con más responsabilidad, con más amor y con más espíritu de servicio, por las necesidades de nuestros hermanos.”
Al término de la Santa Misa se llevó a cabo un desayuno para todo el personal médico y se entregó un reconocimiento al doctor Gilberto de Jesús de la Peña Topete, por los 36 años de servicio a la institución, quien fue el primer cardiólogo con esta especialidad, en el Hospital Alcalde.
