Se llevó a cabo el Encuentro Anual de Cáritas. El Cardenal Robles aseguró que el camino para la paz es la fraternidad. El próximo año Cáritas tendrá actividades encaminadas a construir la paz desde las parroquias.
Sonia Gabriela Ceja Ramírez
El domingo 6 de octubre se llevó a cabo en el Seminario Menor de Guadalajara el 43° Encuentro Anual de Cáritas en el que participaron alrededor de 700 personas, la mayoría de ellos voluntarios.
“El tema, siguiendo una de las tareas de la Pastoral Social, fue la fraternidad, como para rehacer el tejido social, ya que queremos que Cáritas este año colabore a construir la paz. Ser constructores de Paz. Es decir, una expresión de la caridad, de la misericordia, es trabajar por la paz y creemos que es una exigencia de la realidad y una exigencia de la caridad”, explicó el padre Francisco de Asís de la Rosa Patrón, Asesor Diocesano de Cáritas de Guadalajara.
“Cáritas tiene que dar respuesta a muchas situaciones. Ya tiene mucho con los alimentos, también ayudando con cuestiones de salud. Queremos hoy colaborar con las mismas comunidades parroquiales a construir la paz, entonces vamos a empezar a hacer alguna serie de actividades formativas pero también de acción en la parroquia para poder construir la paz que tanta falta nos hace en nuestra patria y aquí en nuestra diócesis”.

En comunión con toda la Iglesia
El Encuentro tuvo momentos de ambientación y adoración al Santísimo. Se contó con la presencia del señor Cardenal José Francisco Robles, Arzobispo de Guadalajara, quien dirigió un mensaje sobre la fraternidad como fundamento y camino para construir la paz. El señor Cardenal agradeció también la labor del voluntariado de Cáritas.
“Después tuvimos un tema de reflexión acerca de la caridad, misericordia que explica el Papa Francisco y que nos dice que la misericordia es tocar la miseria, dejarla entrar en el corazón, descubrir que Dios ha sido misericordioso con nosotros para devolver la misericordia a través de las manos. Dice el Papa, es un viaje que viene de las manos al corazón, de Dios a nuestro corazón y del corazón otra vez a las manos”.
Dijo que cuando Jesús envió a los primeros 72 discípulos les indicó que lo primero que tenían que decir al llegar a una casa era ‘la paz esté con ustedes’, “y en las Sagradas Escrituras, cuando Dios dice, hace. Entonces, cuando nos dice digan, significa hagan. Hagan la paz, construyan la paz.
“Invitamos a todos los grupos de Cáritas parroquial a fortalecerse y a participar para construir la paz”.
Aseguró que Cáritas Diocesana durante el año hará varias propuestas para que mediante acciones concretas las Cáritas parroquiales puedan constituirse como agentes constructores de la paz.
Ser buenos administradores de Dios
A las 12 del mediodía se tuvo la celebración de la Misa presidida por Mons. Engelberto Polino Sánchez, Obispo Auxiliar de Guadalajara quien durante la homilía compartió con los voluntarios de Cáritas una interesante explicación sobre la Espiritualidad de la Corresponsabilidad o de las Cuatro “T”.
“Esta espiritualidad parte de una enseñanza que el pueblo de Israel tiene muy presente, el Shema Israel, escucha Israel: El Señor tu Dios es solamente uno: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu mente, con toda tu alma y con todas tus fuerzas.
“Esta espiritualidad dice que todo es de Dios. Nosotros mismos hemos recibido la vida como un don de Dios y después de la vida hemos recibido muchos regalos por parte de Dios. Todo es de Dios y nosotros somos administradores de los dones de Dios: Administramos tres “T” y con esto construimos una cuarta “T”.
“La primera “T”. Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón. Es el tiempo. Dios vive en la eternidad y ha creado el tiempo para ti y para mí. Es en el tiempo y en el espacio donde nosotros nos santificamos. Es el tiempo en el que Dios espera que cada uno de nosotros aprovechemos para actuar.
“La segunda “T” es amar a Dios con toda tu mente y con toda tu alma. Esta “T” se relaciona con algo que está oculto (la mente y el alma no se ven), esta espiritualidad le llama talentos a todo lo que hemos recibido en lo oculto del vientre de nuestra madre. Es herencia de nuestro padre, de nuestra madre, que Dios ha querido regalarnos a nosotros y que desde el vientre de nuestra madre ha puesto en nuestra vida.
Ser testigos de lo que hemos recibido

“Tercera “T” amarás al Señor tu Dios con todas tus fuerzas. Esto se relaciona con las riquezas que recibimos del exterior, que en esta espiritualidad se le llama tesoros, la fe que hemos recibido, el amor recibido de nuestros padres, la familia donde Dios nos ha puesto, la parroquia donde estamos y mediante la que Dios nos enseña y nos acompaña a través de una comunidad. La historia que hemos vivido con todas las experiencias hermosas, pero también las dolorosas, las difíciles; esas personas que nos aman y las que no nos han amado pero de las que nos han dejado experiencias de las que también hemos aprendido. Todo lo que hemos recibido del exterior: la casa, el trabajo, los hijos, los hermanos, esto es un gran tesoro y Dios lo ha puesto para que lo administremos.
“Cuando nosotros administramos bien estas tres “T”, construimos una cuarta “T” que es el testimonio. Dice Jesús, ‘para que viendo tus buenas obras, otros también alaben al padre que está en el Cielo’.
“Estamos llamados a ser administradores fieles de Dios”.
Finalmente, Mons. Polino dijo a los presentes que cada uno, “desde la caridad, el buen trato, desde el servicio, podemos manifestar esa paz que es Dios y que vive en nosotros. Estamos llamados a generar desde la práctica de la caridad, desde el encuentro con el hermano”, aseguró.
“Que el Señor nos ayude a cada uno para ser signos de la presencia de Dios en medio de nuestra comunidad”.
Al término de la Celebración Eucarística y para concluir el Encuentro, los presentes compartieron los alimentos.
Cardenal Robles: La fraternidad es el camino para encontrar la paz
Yara Martínez
La fraternidad es el fundamento y el único camino para encontrar la paz, aseguró el Arzobispo de Guadalajara, Cardenal José Francisco Robles Ortega, durante su mensaje dirigido a los voluntarios de Cáritas Guadalajara, que se llevó a cabo el domingo en el Seminario Menor.
Ahí, el purpurado destacó la hermandad que tenemos como hijos del mismo Padre, Dios Nuestro Señor, por lo que estamos sellados por su misericordia y, por ello, “la vida de todo cristiano, de toda cristiana, tiene que se ser la expresión de ese descubrir y de esa experiencia del amor y la misericordia de Dios, porque no hay discípulo de Cristo que no se sienta llamado a vivir la caridad”.
Asimismo hizo un llamado a eliminar todo aquello que separa y enfrenta a los seres humanos y, de la misma manera, a darse cuenta que toda persona tiene la misma dignidad, el mismo valor y el mismo derecho, además de las mismas obligaciones, por lo que no se debe pensar en destruir al otro, sino se debe buscar caminar en paz.
“La paz nunca la vamos a lograr por discursos, por decretos, por declaraciones, la paz se construye en la vivencia de la fraternidad, porque somos hermanos y hay que tratarnos como hermanos, hay que ayudarnos como hermanos, hay que reconciliarnos y vivir así, en paz, que ese fruto de la paz sea la vivencia de nuestra dignidad de hijos únicos de Dios, Jesucristo Nuestro Señor”.