Rebeca Ortega Camacho
Nuevamente, se pone a discusión el derogar el Artículo 182 del Código Penal de Jalisco, relativo al delito de adulterio. Al respecto, el Cardenal José Francisco Robles Ortega, Arzobispo Metropolitano, señaló que la Iglesia pide a los contrayentes del Sacramento del Matrimonio se garantice y se viva la fidelidad.
“La fidelidad es un valor definitivo de la unión matrimonial, pero es obvio que como todas las faltas, todos los pecados o todas las faltas al compromiso, es obvio que son susceptibles de dispensa de perdón; no necesariamente tiene que ser causa de divorcio, de separación. Lo que la Iglesia pide es, primero que se garantice y se viva la fidelidad, si desgraciadamente no se vive la fidelidad, el recurso es el perdón, la reconciliación y en último término si no se puede, vendría la separación”, dijo el Arzobispo de Guadalajara en rueda de prensa el domingo 21 de julio.
La Legislatura pasada aprobó en la Comisión de Puntos Constitucionales la derogación del delito de adulterio, el 11 de septiembre del 2018; sin embargo, al llegar al Pleno, la Mesa Directiva la regresó nuevamente a la Comisión de Puntos Constitucionales, por lo que la diputada Sofía García Mosqueda, presidenta de la Comisión de Igualdad Sustantiva y de Género, presentó la iniciativa al Congreso local el pasado 10 de julio. Jalisco es el único estado del país donde el adulterio se contempla como delito.
No se hace justicia al Cardenal Posadas
Por otra parte, se cuestionó al purpurado si la sentencia al Chapo Guzmán dictada por la corte federal de Nueva York, hace justicia al asesinato del Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo. El Arzobispo Metropolitano contestó que, “mientras no se aclare, mientras no se defina quién fue el actor intelectual de este crimen, pues no”.
El miércoles 17 de julio de 2019, Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera fue condenado a cadena perpetua más 30 años de prisión. “No fue enjuiciado sólo por eso- asesinato del Cardenal Posadas Ocampo- fue enjuiciado por toda su actividad en el narcotráfico, del crimen organizado, de tal manera que el tema del Cardenal Posadas sí entró en las investigaciones, pero no es el tema decisivo de su sentencia”, señaló el Cardenal Francisco Robles.
Enfatizó que, “la sentencia corresponde a lo que las autoridades valoran como una vida de actividad criminal que causó muchos daños a la sociedad, a las familias. Como que era de esperar una sentencia en ese sentido”.
El asesinato del Cardenal Posadas Ocampo ocurrió el 24 de mayo de 1993 en el estacionamiento del Aeropuerto de Guadalajara en medio de una balacera, en donde al intentar descender de su vehículo, recibió 14 impactos de bala.
Tarea pendiente
En otro tema, el Arzobispo de Guadalajara se refirió los desaparecidos y la desesperación de las familias al no tener noticias de su ser querido. Manifestó que en los últimos quince días, dos personas se acercaron a él para solicitar su oración por un familiar desaparecido.
“Entonces, quiere decir que el tema está, que el tema es muy grave por todo lo que cada día se va descubriendo y es desesperante, sobre todo para los que tienen seres queridos desaparecidos. Es desesperante que las autoridades no se apliquen, porque es un tema gravísimo que debiera, por así decirse, prevenirse y en el caso de que ya haya sucedido esta situación, pues que los familiares tuvieran el consuelo de que se les pone atención esmerada, atención para resolver la situación de sus desaparecidos. Es una tarea pendiente que tienen nuestras autoridades”, indicó el Cardenal Robles Ortega y agregó que no se tienen reportes de sacerdotes amenazados por el crimen organizado.
Por último, señaló que ningún templo de la Arquidiócesis de Guadalajara se ha visto afectado, de manera grave, por las torrenciales lluvias de los últimos días.
