Fernando D’Sandi El tiempo ha pasado implacable…La frenética danza de números en una escalada imparable de afectados en salud, en economía, en pérdidas humanas …
"En la Iglesia tenemos urgente necesidad de una comunicación que inflame los corazones, sea bálsamo en las heridas e ilumine el camino de nuestros hermanos y hermanas"