Querida Lupita:
Hago cosas que no debo hacer y esto afecta a mi matrimonio. Miento en cosas tontas, he sido un cobarde y mi esposa ha perdido la credibilidad en mí. Me siento como un tonto. ¿Cómo puedo obtener sabiduría para cambiar de verdad y no perder a mi esposa y a toda mi familia?
Raymundo C.
Muy estimado en Cristo, Raymundo:
Quiero felicitarte por la pregunta que haces, pides obtener sabiduría. El mismo Dios se sintió complacido con Salomón, cuando le dijo: «Pídeme lo que quieras.»
Salomón respondió: dame sabiduría y conocimiento para dirigir a este pueblo.
Dios entonces habló así: «Puesto que éste ha sido tu deseo, y no has pedido riquezas ni bienes ni honores, ni la muerte de tus enemigos, ni tampoco una larga vida, sino sabiduría y conocimiento, te lo concedo y te daré además riquezas, bienes y honores”. (2 Cro. 1, 7-12).
Lo primero que debes hacer es pedirla. Necesitas desarrollar una relación con Dios muy cercana a través de la oración constante. Enseguida, buscarla. Esto significa que debes saber que es todo un proceso que implica tiempo, busca esta sabiduría en la Palabra de Dios que es fuente de conocimiento e inteligencia. Hay libros espirituales que pueden aportarte una sólida base para construir tu nueva forma de pensar y de actuar. Dos de ellos son: La imitación de Cristo, de Tomás de Kempis; y El combate espiritual, de Don Lorenzo Scupoli.
En tercer lugar, una vez que conoces lo que Dios te pide, obedecerle. No es lo mismo creer en Dios que creerle a Dios.
Después debes edificarte con medios humanos que perfeccionen tu manejo emocional y las habilidades sociales que has de desarrollar. Como todo en la vida, el triunfo es fruto del esfuerzo continuo.
Revisa con honestidad las causas por las cuales mientes, investiga en tu pasado qué es lo que puede estar fomentando esta tendencia en ti. Ahora platícalo con tu esposa y pide su ayuda, los dos son un equipo. Mantengan su relación en condiciones de igualdad, es decir, ella no es superior a ti ni tú a ella, los dos son seres humanos cumpliendo uno de los fines del matrimonio: la ayuda mutua.
Lupita Venegas/psicóloga
Facebook: lupitavenegas