David Hernández
Ante la emergencia sanitaria que atraviesa el mundo por el coronavirus (COVID19), templos, basílicas y catedrales han cerrado sus puertas suspendiendo el culto público y limitándose a transmitir por redes sociales la Santa Misa, donde solo participa el sacerdote y un par de personas.
Sin embargo, una duda se ha generado en los fieles católicos durante esta Semana Santa: ¿Puede celebrarse el rito del lavatorio de pies guardando una distancia considerable?
Al respecto, el Vaticano se ha pronunciado con un decreto emitido desde la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, señalando que éste y otros signos quedan suprimidos.
“Se omita el lavatorio de los pies, que ya es facultativo. Al final de la Misa en la Cena del Señor, se omita también la procesión y el Santísimo Sacramento se reserve en el sagrario. En este día, se concede excepcionalmente a los presbíteros la facultad de celebrar la Misa, sin la presencia del pueblo, en lugar adecuado”, señala el decreto publicado el 25 de marzo de 2020.
Otros signos suprimidos
El Viernes Santo durante la oración universal, los Obispos prepararán una especial intención por los que se encuentran en situación de peligro, los enfermos, los difuntos (cf. Missale Romanum). La adoración de la Cruz con el beso se limite sólo al celebrante.
En la Vigilia Pascual del sábado, se celebrará solo en las iglesias catedrales y parroquiales. Para la liturgia bautismal, se mantenga solo la renovación de las promesas bautismales, sin bautizos.