Pbro. Lic. Miguel Ángel González Gámez
Como es sabido por todos, por lo menos ese debería ser el anhelo, el que todos estuviéramos al pendiente de lo que se discute en la vida pública del país, en el Congreso de la Unión se analiza la propuesta enviada por el poder Ejecutivo sobre la ley de ingresos y el presupuesto de egresos de la federación. Por lo que es preciso preguntarnos sobre el origen de los recursos del gobierno y cuáles son los fines al gastar todo ese dinero.
Sobre el origen, podremos decir que “para financiar sus funciones, el Estado cuenta esencialmente con cuatro fuentes principales: los impuestos; el cobro por la prestación de bienes y servicios públicos, con fundamento en sus atribuciones de derecho público y privado; el endeudamiento, y las transferencias unilaterales nacionales e internacionales de las cuales es receptor (Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, 2018).
Sin embrago, en nuestro país sólo usamos tres de estas fuentes, a saber, primero son los impuestos en donde los más conocidos son el impuesto sobre la renta(ISR), es decir, se te cobra un porcentaje de las ganancias obtenidas y el impuesto al valor agregado (IVA), es decir, de lo que consumes se te cobra un porcentaje más; segundo, son los recursos que se obtienen por la venta que hacen las empresas y organismos del Estado, ejemplo PEMEX, y tercero el endeudamiento, es decir, dinero que se pide prestado para obras específicas, puede ser a organismos internacionales o nacionales.
Cada año, por estas fechas, el poder Ejecutivo envía al poder Legislativo su propuesta de cómo tiene planeado hacerse de los recursos, lo que llamamos Ley de Ingresos, esta ley primero la aprueban los diputados y después los senadores.
Así mismo, llega el Presupuesto de Egresos de la Federación, donde el poder Ejecutivo, por medio de la Secretaría de Hacienda, especifica en qué se va a gastar lo que piensa recaudar, el presupuesto sólo lo aprueban los diputados, pues representan al pueblo.
Cabe señalar que estas dos propuestas están orientadas por un documento que hace el Presidente al inicio de su sexenio, que se llama el Plan Nacional de Desarrollo, ahí manifiesta sus prioridades en el ejercicio del poder y del gasto.
¿Y qué es lo que busca un gobierno al gastar ese dinero que recibe? Lo primero es que mediante los impuestos se busca lograr un equilibrio social, es decir, un gobierno con lo que recibe debe de subsidiar las necesidades sus ciudadanos.
Lo digo en otro lenguaje, el gobierno debe garantizar los derechos fundamentales: la salud, los servicios públicos, seguridad, protección social, justicia, educación, participación ciudadana, etc., la forma más eficiente para que una persona pueda salir adelante es que pueda tener servicios de calidad y poder orientar los recursos que recibe por su trabajo en sus prioridades personales.
Un gobierno no está para regalar dinero, un gobierno es el que sabe dar buenos servicios a sus ciudadanos, eso se llama eficiencia.
Un gobierno genera equilibrios sociales cuando gasta el recurso de una manera que ayude a sus gobernados a quitar cargas que obstruyen el desarrollo personal, cuando genera proyectos de inversión que se convierten después en recursos adicionales para hacer realidad los proyectos de beneficio social, cuando crea instituciones que ayudan en el desarrollo integral de las personas y en el ejercicio de los derechos. Por eso, es indispensable que los ciudadanos estemos atentos en estos temas para saber pedir cuentas y verdaderos resultados.