Monserrat M. Cuevas
Con la bendición del señor Cardenal José Francisco Robles Ortega y unas palabras emotivas, este viernes fueron enviados al campo de batalla 31 nuevos sacerdotes, ordenados el pasado 18 de octubre en el Santuario de los Mártires.
El arzobispo tapatío les pidió que siempre mantengan encendida la llama de la alegría y de la fe: pero sobre todo su mirada puesta en quien los eligió.
“Que esta alegría no se agote nunca que siempre este presente hoy es el día en el que el señor les manifestó su amor, muy puntual y muy concretamente Dios les manifestó su predilección, su amor a cada uno de ustedes y no por él medito de ustedes, sino porque Dios es amor y porque Dios libremente quiso fijarse en ustedes”
Robles Ortega señaló que la misión encomendada, es principalmente para estar al servicio de los fieles; en compañía de otros hermanos sacerdotes.
“Espero que este su primer destino vayan con mucha ilusión, con mucha alegría a servir a los hermanos, se integrarán en un proceso de pastoral que ya lleva la comunidad; no lo van a originar ustedes, no lo van a iniciar ustedes: es un proceso que se lleva por el párroco actual por otros sacerdotes anteriores, es un proceso que ustedes se van a integrar para poner lo mejor que ustedes llevan en su ilusión en su vocación en su iniciativa”
Giovanni Camarillo, nuevo sacerdote, emocionado por su nueva encomienda, señaló que está listo para servir a la comunidad de San Pablo Apóstol, ubicada al oriente de la ciudad.
“Me siento muy contento y agradecido con Dios y con la virgen; vamos a poner todo nuestro servicio a disposición de la comunidad de San Pablo apóstol al oriente de la ciudad, también estoy agradecido con el señor cardenal José Francisco Robles Ortega por confiar en nosotros y por entregarnos estos nuevos destinos, dónde estoy seguro; que al igual que mis hermanos sacerdotes seremos ejemplo de servicio”
Los nuevos sacerdotes comenzarán actividades a partir de la primera quincena de este mes, con la alegría de anunciar el evangelio.
