Sergio Padilla Moreno
Una pregunta que surge en medio de los tiempos complejos que estamos viviendo como humanidad y, por ende, como Iglesia, es si las y los santos siguen siendo referencia para las y los católicos de hoy.
La respuesta, esperaríamos, podría ser afirmativa, pero lo cierto es que, por los tiempos que corren, es indispensable hacer una lectura actualizada de la vida de los hombres y mujeres que, en diversas épocas, contextos, circunstancias y procesos interiores, hicieron del evangelio el criterio central de su vida.
Quizá muchos que ya peinan canas recuerden con afecto los comics de “Vidas Ejemplares” que se editaron hace años, pero que tenían adaptaciones de las vidas de los santos que suenan anacrónicas para la mentalidad y los retos vitales de hoy.
Bajo tres visiones
Ahora que estamos celebrando el Año Ignaciano, con motivo de los 500 años del acontecimiento que significó el inicio del proceso de conversión de San Ignacio de Loyola (de quien celebramos su memoria el 31 de julio), es una ocasión propicia para acercarnos a tres interesantes y valiosas miradas sobre la vida del fundador de la Compañía de Jesús.
La primera mirada es la que hizo el propio Ignacio al dictarle sus recuerdos y reflexiones a su secretario, el P. Luis Gonçalves da Câmara entre 1553 y 1555, es decir, en lo que se ha llamado la “Autobiografía”. El texto es más bien escueto, ya que Ignacio era muy reticente para hablar de sí mismo, por lo que está narrado en tercera persona, en donde este hombre de origen vasco recuerda y reflexiona sobre etapas importantes de su vida. Como dice Javier Melloni, es “un texto que brota de la experiencia y que convoca a la experiencia”, por lo que ha exigido a personas especializadas y expertas ahondar en lo que narra el propio santo.
En su aspecto más humano
Uno de esos libros que vale la pena leer para profundizar en la propia mirada de Ignacio es Éxodo y éxtasis en Ignacio de Loyola. Una aproximación a su Autobiografía, del citado jesuita español Javier Melloni. El autor presenta una muy interesante y actual mirada sobre el fundador de los jesuitas a través de tres claves: primero, la contextualización de la vida que se plantea en el texto; el segundo es un análisis de la experiencia espiritual de San Ignacio y el tercero una propuesta de lectura actualizada de su peregrinaje (éxodo) y espiritualidad (éxtasis).
El tercer texto es la magnífica biografía hecha por el P. José Ignacio Tellechea Idígoras, titulada Ignacio de Loyola, solo y a pie, editado en 1990. El valor fundamental de este libro es que está realizado desde la mirada especializada y erudita de un historiador que pretende, como dice en la introducción: “contemplarle a la cara, no de espaldas; desnudar de clichés y de imágenes gloriosas nuestra memoria, girar decididamente las manecillas del reloj, acompañarle en su largo itinerario o peregrinación sin saber lo que va a pasar más tarde. En suma, por elemental discurso de método, olvidar al santo.”
Ignacio de Loyola y Javier Melloni
El autor es académico del ITESO, Universidad Jesuita de Guadalajara – padilla@iteso.mx