Norma Angélica Trigo
A los 13 años comenzó a identificarse como mujer y a sentir atracción por los maquillajes, la ropa y accesorios que generalmente utilizan las féminas.

Hoy a los 16, Omar (a quien llamaremos así por protección a su identidad) se atreve aún más a caracterizarse, como él lo señala, y sale a la calle vestido de mujer, maquillado y con tacones, cuando va a alguna fiesta o sale de paseo. Sin embargo, enfatiza, que no cambiaría su identidad siendo menor de edad, porque aún tiene la duda de que en un futuro quisiera seguir siendo varón.
“Yo digo que entre sí y no, en realidad uno piensa (así) ahorita y en un futuro puede cambiar la cuestión del pensamiento”.
¿Crees que después pudieras seguirte identificando como varón?
“Ajá”.
¿Por qué no convendría que en este momento, siendo menor de edad pudieras cambiar tu identidad en un documento oficial?
“Porque después sería más complicado en cuestiones de trámites (regresar al sexo original) y luego la toma de decisiones también por eso”.
PERCEPCIÓN FEMENINA
Recuerda que hace tres años comenzó a percibir una atracción especial por el mundo del maquillaje y vestirse como mujer.
“Me gustaba, sentía más atracción por lo que era el mundo del maquillaje, vestirme como mujer, caracterizarme como mujer. Veía a mi mamá y a algunas primas”.
Dijo que antes de esa edad, su vida como varón era como la de cualquier otro jovencito.
Mencionó los momentos en los que se transforma y que lo hacen sentir bien.
“Caracterizado cuando voy a fiestas bien, pero normalmente sí salgo con maquillaje y con ropa de mujer”.
DIFICIL HABLARLO CON LA FAMILIA
Una vez que Omar decidió vivir su personalidad femenina, tomó la determinación de hablar con sus padres, quienes viven separados y la respuesta no fue del todo como esperaba.
“Hablé con mi familia, con mi mamá lo platiqué y con mi papá fue un momento muy incómodo y fue cuando se lo dije. Mi mamá sí me apoyó en esas cuestiones y mi papá sí me apoya pero no que digamos muy bien”.
El joven estudiante de secundaria, dijo sentirse bien con su cuerpo. “Me siento bien, hasta ahorita no tengo ningún (problema)… me siento satisfecho con mi cuerpo”.
HA LIBRADO LA DISCRIMINACIÓN
Oscar dijo sentirse afortunado de no ser agredido como otras personas por el hecho de tener una preferencia diferente a su sexo original.
“Por el momento todavía no, mis compañeros de la escuela no me han agredido, en la calle solo uno que otro comentario, pero nada relevante. En mi escuela sí he recibido apoyo por parte de mis compañeros, me la llevo muy bien con todos”.
PREFIERE APOYOS EFECTIVOS
El joven estudiante, quien tiene que trabajar para poder pagar sus propios gastos de transporte, de material para trabajos escolares y gastos personales, además de ayudar a su familia, pidió que se legisle para apoyar a quienes estudian y trabajan ya que por falta de recursos económicos no podrá ingresar a la preparatoria en el próximo ciclo escolar. Un año trabajará para ahorrar y hasta el siguiente ciclo buscará continuar con sus estudios de forma abierta.
Actualmente se levanta a las 5 de la mañana para a las 5.45 estar esperando el camión que lo deje en el lugar donde luego toma un moto taxi que lo acerca a su secundaria para ingresar a las 7 de la mañana y siempre es el primero en llegar.
Los fines de semana trabaja en un restaurante y aunque sabe que no es fácil, en un futuro se ve como empresario, quizá en el mundo del diseño de modas o del sector de la belleza, que es lo que le gusta.
Omar nos dejó claro que hay prioridades como pagar sus estudios, transporte y comida y en eso se deben enfocar las autoridades más que en facilitarles un documento que aún no están seguros de querer.
Si desea ver el video de la entrevista con Omar, puede hacerlo en la siguiente liga: