Por Herbey Eguiarte Alcalá
Director FIC Valores
Peleando por mi vida
(The Survivor, EUA 2021)
Dir. Barry Levinson
La Segunda Guerra Mundial, y particularmente el holocausto, tienen todavía muchos horrores por contar. Aún existen historias que por obvias razones se han mantenido en secreto y a veces los
mismos protagonistas son quienes prefieren no recordarlo. El dolor que provoca la memoria sobre
los lugares y los sentimientos que tuvieron les justifica a guardar silencio, a mantenerse alejados a
evitar socializar con otros.
Tal es el caso de Harry Haft, un hombre que mientras estaba recluido en el reconocido campo de
concentración de Auschwitz en Polonia era forzado a pelear contra otros presos para,
literalmente, sobrevivir. Él se siente un traidor, y mucha gente a su alrededor se lo hace saber y se
le trata de forma despectiva aunque su principal juez es él mismo.
Historia fragmentada
La película está contada en diferentes tiempos. Por una parte el oscuro pasado, a blanco y negro,
que nos cuentan su captura y destino en la guerra y por otro lado, los tiempos como hombre libre,
dedicado al boxeo, en que sufre los efectos posteriores que le impiden estar concentrado mientras
se prepara para un encuentro con el mítico boxeador Rocky Marciano. Aunque el reto principal
está en que sea capaz de encontrar su propia felicidad.
Los valores que promueve
Peleando por mi vida, es una película basada en el libro que escribe el hijo de Draft recuperando
las memorias de su padre. La cinta nos lleva por el enojo, la desesperación y nos lleva a pensar en
cómo este hombre judío va a ser capaz de perdonarse a si mismo y a estar en paz consigo mismo y
con Dios después de haber pasado por situaciones incomprensibles para la lógica humana.
Harry emprende un camino de perdón principalmente para sanarse.